Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, acudió este jueves a la Procuraduría General de la República, acompañado de su madre, casi 24 horas después de que se entregara el informe pericial que detalla las causas del colapso de la emblemática discoteca capitalina.
Su abogado, Miguel Valerio, informó que ofrecerá declaraciones a la prensa al término de la reunión con Wilson Camacho, titular de la Dirección de Persecución del Ministerio Público.
El informe técnico fue remitido precisamente a esa dependencia, según confirmó Leonardo Reyes Madera, director de la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructuras (Onesvie) y coordinador de la comisión oficial encargada del estudio.
La Procuraduría General es la institución responsable de las investigaciones sobre la tragedia ocurrida el pasado 8 de abril, cuando se desplomó el techo del Jet Set mientras el merenguero Rubby Pérez animaba una fiesta. El colapso causó la muerte de 236 personas —incluido el artista— y dejó más de 200 heridos. Algunas víctimas fallecieron en centros de salud días después del suceso, aunque la mayoría perdió la vida en el lugar de los hechos.
Como parte del proceso, el Ministerio Público incautó formalmente el local el pasado 7 de mayo, marcando el establecimiento con un letrero que decía «INCAUTADO» en letras mayúsculas.
Deja una respuesta