Santo Domingo. En el barrio de Los Mameyes, donde el sonido del mar acompaña historias de fortaleza, vive Maximina Mercado junto a su hija Selva Taveras, un ejemplo vivo de lucha y esperanza. A pesar de las dificultades, madre e hija continúan con fe, esperando la ayuda prometida por el Gobierno.
Selva María, de 34 años, convive desde niña con parálisis cerebral, una condición que requiere cuidados especiales, medicamentos y alimentación adecuada. En su pequeño taller, Maximina crea con dedicación pulseras, collares y adornos que son mucho más que bisutería: son símbolos de dignidad y perseverancia.
Cada pieza refleja horas de trabajo y esperanza. “Cuando alguien compra una de nuestras creaciones, siente que lleva un pedazo de nuestra historia y solidaridad,” expresa Maximina con emoción.
No solicitan limosna, sino apoyo a través de la compra de sus artesanías, que sostienen su hogar y mantienen viva la esperanza. Siguen confiando en que la ayuda prometida por las autoridades llegará para mejorar sus vidas.
Quienes deseen sumarse a esta causa pueden contactarlas al 829-497-5198 y llevarse una joya con alma.
Para Maximina y Selva, la creatividad no es solo un oficio: es la luz que las guía y el motor que las impulsa a seguir adelante, con fe y optimismo, ante cualquier adversidad.
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