Santo Domingo. El abogado y dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Claudio Caamaño Vélez, enfatizó este jueves que el objetivo esencial de la vida humana se resume en una sola palabra: felicidad.
Durante su intervención, Caamaño destacó que el propósito de nuestra existencia no consiste únicamente en acumular riquezas, fama o placeres momentáneos, sino en alcanzar una plenitud auténtica y duradera que llene el corazón y el espíritu.
El dirigente hizo especial énfasis en la diferencia entre placer y felicidad, advirtiendo que confundir ambos conceptos puede generar frustración y traumas emocionales. “Una amante puede dar placer, pero no felicidad; una buena esposa aporta a la felicidad y también da placer”, subrayó. Añadió que tener una casa lujosa puede ofrecer satisfacción momentánea, pero que solo un hogar lleno de amor y convivencia familiar proporciona verdadera felicidad.
Caamaño, quien actualmente se desempeña como director ejecutivo de la Comisión de Fomento y Tecnificación del Sistema Nacional de Riego (TNR), lamentó que a lo largo de la vida se enseñe poco sobre cómo alcanzar la felicidad. “Se nos forma para tener un buen trabajo, y aun logrando eso, no somos felices; tenemos un buen salario, pero lo que hacemos no nos da plenitud”, explicó.
De igual manera, advirtió que la fama, la notoriedad y la importancia social no garantizan la felicidad, y que un porcentaje alarmante de personas atraviesa la vida sin experimentar la verdadera plenitud que el ser humano está llamado a vivir.
En sus reflexiones finales, Caamaño recordó que estar vivos es un milagro, y que aunque la vida pueda traer deudas, tragedias o desilusiones, nunca debemos perder de vista lo afortunados que somos de existir. Hizo un llamado a asumir conscientemente el reto de ser felices, recordando que la felicidad es, en esencia, el propósito principal de nuestra existencia.
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